Flox (Phlox subulata) Planta cobertora por excelencia

 

Esta pequeña planta cespitosa de la familia de las Polemoniáceas es una de las últimas en incorporarse a nuestro jardín.

Ya no teníamos intención de adquirir nuevas variedades de plantas pero el paso del tiempo (los trabajos van pesando) junto con los cambios climáticos nos están obligando a remodelar ciertas zonas que de otra forma estarían feas o nos darían mucho trabajo.

El flox es una planta ideal para cubrir zonas en las que otras plantas más delicadas no quieren estar y su cultivo es muy fácil.

Presenta una floración primaveral espectacular, muy abundante, tan compacta que apenas deja ver el resto de la planta.

Las flores, de unos 3 cm de ancho, pueden ser azules, lilas, rosas o blancas. Son tubulares con 5 lóbulos hendidos en forma de estrella.

Tiene pequeñísimas hojas lineares, casi ciliadas, que forman una masa compacta que cubre por completo todo el suelo por lo que no hay hierba que se atreva a crecer entre ellas.

Qué le gusta

Clima templado, sin heladas fuertes.

Posición muy soleada.

Tierra de jardín normal o algo enriquecida con estiércol o turba.

Riego regular o escaso. En zonas lluviosas como la mía, no necesita riego.

Multiplicación

Muy sencilla y fácil mediante división de la macolla o esqueje. 

Desarrolla raíces poco superficiales por lo que es muy sencillo sacar esquejes ya con raíz simplemente levantando un extremo de la planta tal como puede verse en la siguiente fotografía. Esta operación ha de hacerse con el suelo bien húmedo para que las raíces no se rompan.

La época ideal para multiplicarla es después de la floración.

Poda

Conviene recortarla un poco después de la floración para que vaya rejuveneciéndose. Se recortan los tallos que florecieron por encima de los brotecitos verdes que surgen en la base de dichos tallos.