LA HORTENSIA DE INVIERNO O BERGENIA Características y cuidados.
La primera Bergenia que tuve me la regaló mi suegra.
A mi
nunca me habían gustado las plantas de hojas grandes o muy llamativas y las de
la bergenia, grandes, brillantes y carnosas, me parecían excesivas. Pero no era
plan de decirle que no la quería así que me la traje y busqué en el
jardín un lugar discreto donde situarla.
Pasé tiempo sin hacerle mucho caso y cuando un día me fijé,
quedé sorprendida: ella solita se había buscado la vida y estaba frondosa, llena
de flores, preciosa.
Con el tiempo he llegado a apreciarla como se merece y ahora
mismo tengo Bergenias en muchísimos lugares.
La Bergenia es una planta herbácea (no desarrolla tallos
leñosos), rizomatosa, perenne (con hojas verdes durante todo el año), cespitosa (se
extiende cubriendo el suelo), perteneciente a la familia de las Saxifragáceas,
muy resistente y de muy fácil cultivo.
Sus hojas son grandes, redondeadas, carnosas, de un verde
brillante, tan resistentes y fuertes que no se inmutan ni con sequías, ni
humedades excesivas, ni con calores ni con heladas. Así que por todo eso y por
alguna cosa más, ahora las adoro.
Con el exceso de sol y la falta de agua, se doblan ligeramente para evitar evaporación y se quedan blandas y lánguidas pero, en cuanto cesa el sol fuerte o reciben algo de agua vuelven a recuperar todo su vigor y prestancia.
Hay una variedad, la B. cordiflora, cuyas hojas se vuelven púrpura en invierno.
Sus flores son generalmente de color rosa más o menos pálido aunque existen
también variedades de color blanco, rojo y violeta.
Son pequeñas, numerosas y están dispuestas en cimas o racimos sobre largos peciolos de color carmín.
Tienen 5 pétalos de textura ligeramente carnosa que, estos sí, son algo delicados.
Florece durante gran parte del año, sobre todo en invierno y principios de primavera cuando apenas hay otras flores que las acompañen, razón por la cual son especialmente interesantes.
Son pequeñas, numerosas y están dispuestas en cimas o racimos sobre largos peciolos de color carmín.
Tienen 5 pétalos de textura ligeramente carnosa que, estos sí, son algo delicados.
Florece durante gran parte del año, sobre todo en invierno y principios de primavera cuando apenas hay otras flores que las acompañen, razón por la cual son especialmente interesantes.
Características más destacadas de las bergenias
- Se desarrollan divinamente en climas templados y frescos como éste pero también en climas más extremados como el de León, de donde vino mi primera planta.
- Pueden cultivarse en posiciones soleadas y luminosas pero también en semi sombra e incluso en zonas sombrías.
- Son muy resistentes a las heladas.
- Se adaptan a cualquier tipo de terreno y aunque los prefieran ricos y sueltos, crecen también en lugares pedregosos y secos, en rocallas, en terrenos arcillosos. Tolera perfectamente los suelos calizos. Allí donde no me prospera ninguna otra planta, coloco una bergenia.
- Resisten muy bien la sequía. Conservan el suelo húmedo gracias a sus hojas grandes como parasoles y toda la planta es carnosa por lo que retienen agua no solo en las hojas sino también en los tallos y raíces.
- Son muy adecuadas para borduras y para jardines urbanos ya que resisten muy bien la polución. También resultan indicadas para cubrir taludes difíciles de trabajar, para proporcionar sombra y protección en la base de otras plantas que lo requieran o para cubrir lugares de acceso difícil.
Todos los años, después de la floración o a finales de verano, conviene practicarles una limpieza que consiste en retirar las hojas que se van secando, cortarles los tallos florales ya marchitos y eliminar algún fragmento que se haya envejecido mucho.
Cómo se reproducen
Facilísimamente, por medio de brotes nuevos con un fragmento de rizoma, que se desgajan de la planta vieja sin dificultad. Si son muy largos, se recortan
dejando solo unos cuantos centímetros.
Se extraen a finales del verano o principios del otoño y se colocan
en una maceta o sobre el propio terreno donde vayamos a cultivarla, previamente
cavado y abonado ligeramente con abono orgánico.
También podemos reproducirlas dividiendo la macolla.
También podemos reproducirlas dividiendo la macolla.
Las bergenias pueden cultivarse, además de en el suelo, en cajoneras, macetas, terrazas y balcones.
Comentarios
Si es así podrían indicarme porque es un repelente? Gracias nuevamente