Precioso lirio español (Iris hispanica)
¡Mira que son bonitos los Iris!
Los hay de muchos colores pero a mí me gustan especialmente los azules. También los amarillos y los blancos, pero por encima de todos, los azules, con irisaciones moradas y esas manchas amarillas contrastando como si conocieran la teoría del color.
Los iris se desarrollan a partir de un bulbo que se siembra en otoño, enterrándolo en la tierra unos 8 ó 10 cm en un lugar con buen drenaje, previamente labrado y limpio de malas hierbas.
A finales de invierno comienzan a asomar sus hojas lanceoladas, muy largas y estrechas dispuestas de forma que la base de una se inserta en el interior de la base de otra.
En primavera, del extremo de un tallo o escapo recto y cilíndrico que sale del mismo bulbo, surgen los capullos y de estos, las flores.
Los iris pueden llegar a alcanzar los 60 cm de altura y son ideales para flor cortada por su belleza, su duración y sus tallos rectos muy manejables.
¿Qué les gusta a los iris?
- Un clima templado. Las heladas fuertes pueden helar el bulbo por lo que en climas fríos se recomienda sacarlos de la tierra para pasar el invierno.
- Una posición soleada en la cual florecen mejor, con flores más grandes y hermosas.
- Un suelo suelto, bien trabajado, tirando a calcáreo. El suelo hay que abonarlo con bastante antelación para que en el momento de introducir los bulbos, el abono se haya desintegrado y mezclado bien con la tierra la tierra y el bulbo no corra el riesgo de pudrirse.
- El riego abundante.
Una vez finalizada la floración, pueden recortarse las cabezuelas secas pero conviene dejar el resto de la planta sin cortar hasta que amarillea pues la parte verde de la planta sigue elaborando sustancias nutritivas que quedan almacenadas en el bulbo para la siguiente floración.
Si no es todos los años, cada 3 años conviene sacarlos de la tierra y renovar esta o cambiar el lugar de plantación.
Se sacan cuando la parte aérea se ha secado por completo, se les retira, se dejan secar muy bien, se les eliminan los restos de tierra y se guardan en una caja de cartón en un lugar seco.
Si no se desentierran, se corta la parte aérea al ras de tierra, una vez se haya secado.
Multiplicación
Alrededor del bulbo se forman pequeños bulbillos con los que se reproduce la planta.
Esos bulbillos se extraen junto con el bulbo grande, se desprenden de él y se guardan hasta el momento de la plantación.
La primera temporada se dedicarán a engordar y como mucho, desarrollarán unas hojitas pero a la temporada siguiente florecerán.
Son plantas de muy fácil cultivo y a pesar de su aspecto delicado, muy resistentes.
Pueden cultivarse también en maceta o cajonera.
Son efímeros pero muy hermosos.
Merece la pena tener un grupito de ellos y disfrutar todos los años de su belleza.
* Hay tantas variedades de iris que es posible disfrutar de ellos durante muchos meses del año:
- Iris danfordiae: enero y febrero, color amarillo
- Iris reticulata: enero y febrero,
- Iris bucharica: abril y mayo, colores blanco y amarillo
- Iris unguicularis: de noviembre a marzo, color azul
- Iris de Holanda: junio y julio tierra ligera, calcárea, bien drenada exposición soleada o en semisombra.
Comentarios
Muchos besos, Lidia.