Cómo cultivar rabanitos en huerto o maceta
Su cultivo es uno de los más fáciles y rápidos, perfecto para realizarlo en una maceta en la terraza pero también en el huerto junto a otras hortalizas de más larga duración.
A partir de la siembra (entre los 3 y los 7 días siguientes), comienzan a aparecer las plantitas y crecen y engordan enseguida por lo que en poco tiempo estaremos disfrutando de sus raíces en la mesa, como parte de nuestras ensaladas o de sus hojas en cremas y purés.
Siembra
Podemos llevarla a cabo a lo largo de todo el año aunque es recomendable evitar las épocas más frías, con heladas y las más calurosas del verano.
- Rellenamos una maceta con tierra de cultivo a la que NO añadiremos compost o abono orgánico.
- Esparcimos las semillas.
- Las cubrimos con un poco de tierra. Unos 2 o 3cm bastará.
- Las apisonamos o apretamos ligeramente con algo plano (una maderita por ejemplo) para que las semillas tengan buen contacto con la tierra.
- Regamos y lo mantenemos húmedos hasta que nazcan.
- Si la siembra la realizamos en verano, mejor situarlos donde tengan algo de sombra.
Aquí podéis ver las plantitas asomando.
A los 14 días serán así.
Tendremos que eliminar las que sobran, entresacarlas o aclararlas de forma que quede una separación de 3 a 5 cm entre planta y planta.
Las plantitas arrancadas son comestibles pero no podemos utilizarlas para replantar en otros lugares ya que sus raíces queden dañadas.
Una buena idea es sembrar pocos pero cada poco (siembras sucesivas) a fin de tener cosecha tierna continuamente.
Los rabanitos hay que cosecharlos tiernos pues con el tiempo se ponen duros y amargos y hay que regarlos bien durante todo el cultivo para que no pasen sed en ningún momento.
¿Habéis visto qué bonitas son las flores de los rabanitos? Y también son comestibles al igual que sus hojas con las que podemos hacer purés, tortillas, cocerlas o tomarlas en ensalada.
Las plantitas arrancadas son comestibles pero no podemos utilizarlas para replantar en otros lugares ya que sus raíces queden dañadas.
Los rabanitos hay que cosecharlos tiernos pues con el tiempo se ponen duros y amargos y hay que regarlos bien durante todo el cultivo para que no pasen sed en ningún momento.
¿Habéis visto qué bonitas son las flores de los rabanitos? Y también son comestibles al igual que sus hojas con las que podemos hacer purés, tortillas, cocerlas o tomarlas en ensalada.
Comentarios
Un beso grande.
Besos Lidia