CAMPÁNULAS O FAROLILLOS, una explosión de color azul


Las campánulas son plantas cespitosas llamadas también cobertoras o rastreras porque con el tiempo van cubriendo el suelo formando conjuntos compactos y tupidos.

De pequeña estatura, no alcanzan más allá de  los 30cm de altura.

Son plantas herbáceas, perennes, siempre verdes, muy rústicas y de muy fácil cultivo.
Su floración es muy abundante y si las condiciones son favorables, puede extenderse a lo largo de todo el año aunque su época  de verdadero esplendor es ahora, de mediados de primavera hasta mediados del verano.


Sus flores azules (las hay también blancas), en forma de campanilla, forman verdaderas masas de color que trepan, corren o cuelgan en cascada.

Aunque son plantas propias de climas templados y de zonas umbrosas, resisten bien las heladas y las exposiciones soleadas.


Les gusta la humedad (que no el encharcamiento) y el suelo fértil pero son capaces de vivir y florecer en condiciones totalmente adversas, prácticamente sin tierra y sin agua, en las grietas de las rocas calcáreas, entre las piedras de los caminos, en cualquier lugar donde le llegue un poco de humedad de vez en cuando.


Sus hojas son redondeadas y dentadas.


Sus tallos son finos y frágiles y sus raíces, muy superficiales y diminutas, no representan competencia para las plantas que crecen a su lado. De ahí que sean ideales para proteger y cubrir los suelos de otras plantas que requieren tener sus raíces frescas y húmedas.


Se multiplican muy fácilmente por división de la mata en  otoño o primavera.
El único cuidado que requieren es el de eliminar los tallos con las flores secas después de la floración. Se hace sin ninguna dificultad y sin necesidad de tijeras, simplemente cogiendo puñados de tallos secos y tirando suavemente de ellos.


Ahora mismo están impresionantes. Fijaos cómo lucen ya sea colgando como en la foto superior o reposando sobre el borde de una terraza o camino.


Parece imposible que sean  tan hermosas y delicadas de apariencia y tan rústicas y resistentes en la realidad. ¡Y tan sociables! lo mismo medran al lado de unas fresitas silvestres que haciéndole compañía a unos geranios.



Comentarios

OTRO DÍA PERFECTO ha dicho que…
Una auténtica preciosidad. Mis padres en su jardín tiene Acedera (trébol) y las mil florecillas malvas y blancas que tienen hacen un efecto parecido. Es una auténtica gozada verlas. Además, estas campánulas tienen pinta de ser agradecidas, ¿no?.
Un beso grande!!
Danae ha dicho que…
Buscando cómo cultivar violetas, he llegado hasta aquí, muy bonito tu blog. Vivo en la falda del Montseny y tengo un pequeño huertecito y de camino cada día descubro nuevas florecillas silvestres que me dejan admirada, me encanta observarlas. Me quedo como seguidora y como veo que también tienes intereses culinarios te invito a visitar mi blog que no está actualizado pero puede haber alguna receta que te guste. Verás que también hago flores de azúcar. Un saludo.
Danae ha dicho que…
Uy.... perdona, no te he dicho cual era mi blog: http://azucarycolor.blogspot.com.es/
Lidia ha dicho que…
¡Muy agradecidas! no hay que trabajar con ellas y ya ves cómo florecen y cubren el suelo. Aquí las acederas se consideran malas hierbas porque invaden los huertos y no hay forma de descastarlas pero cierto que también son muy bonitas. Un beso preciosa
Lidia ha dicho que…
Gracias Danae, ya te haré una visita. Saludos
La Biosfera de Lola ha dicho que…
Hola mi querida Lidia, me gusta ese maravillosa convivencia que tiene tu jardín. Aquí la Carrasquilla azul esta también espectacular. Un besin enorme, buen día.
Lidia ha dicho que…
Es impresionante la carrasquilla, con esas tonalidades del rosa al azul pero desgraciadamente en nuestro jardín, a pesar de ser gran parte de él un roquedo calizo, no se da. Me alegro mucho de que estés de vuelta. Un abrazo.
Elena ha dicho que…
Hola Lidia. Gracias por esas entradas siempre tan interesantes y de las que tanto aprendo. Tu blog me resulta muy próximo pues también vivo en Cantabria.
Recuerdo que hace muchos años tuve una variedad de campánula blanca con hojas grisaceas y aterciopeladas, que hacia unas matitas preciosas.La perdí y no la he vuelto a ver. ¿La conoces?
Un saludo y gracias.
Elena
Lidia ha dicho que…
Hola Elena: encantada de saludarte. La campánula blanca no la tengo. Me pasó lo que a ti, que hace tiempo la tuve y se me perdió. Cuando veo que alguna planta no se adapta con total facilidad no insisto pues la experiencia me dice que no merece la pena tenerlas a la fuerza. Muchas gracias por tu comentario.