¿SEMBRAMOS LOS GUISANTES?

Hoy ha amanecido un hermoso día soleado, ideal para trabajar en el jardín. ¿Qué tal si sembramos los guisantes?

Ya sabemos que a estas leguminosas les gusta un ambiente fresco por lo que se siembran muy pronto. Con el calor, se enferman y son atacados por los insectos que ponen en ellos sus huevos, pero sembrados en tiempo frío o fresco, se crían sanos y sin problemas. Otros años esperaba a febrero pero está viniendo un tiempo tan bueno que ya es el momento.

No son nada exigentes en cuanto a suelo o riego y dejan el terreno cargado de nitrógeno que almacenan en unos bultitos que desarrollan en las raíces.

Por esta razón, a la hora de retirarlos de la cajonera, en vez de arrancarlos, conviene cortarlos al ras con tijera y dejar las raíces en la tierra para que se descompongan y la abonen de forma natural.

SEMILLAS
Lo mejor es comprar una buena variedad. Las compradas vienen protegidas, limpias y desinfectadas por esa razón y para no confundirlas con los guisantes para comer, están coloreadas de naranja o rosa.

Para no tener nada más que el trabajo (o diversión) de sembrar y recolectar, yo elijo una variedad enana: "Guisantes enanos LINCOLN GANXO".
Variedad enana no significa fruto pequeño o raquítico. El fruto será exactamente igual de grande y bueno que el de las variedades de enrame. Significa que la planta no alcanzará una altura mayor de 40-45cm por lo que no será necesario trabajar poniéndole tutores, estará más resguardada del viento y cosechar será muy fácil. En la foto de portada se pueden ver los frutos que recolecté la temporada pasada.

SIEMBRA

Como los guisante son plantas de asiento, se siembran en el mismo lugar donde vivirán todo el tiempo por lo que las semillas no se echan a voleo sino que se colocan un poquito separadas, unos 5-6  centímetros unas de otras.

Colocándolas a esa distancia, sus raíces, poco expansivas, tendrán espacio vital suficiente y las plantas crecerán lo suficientemente juntas como para darse sombra, mantenerse frescas, mantener la tierra húmeda y evitar el nacimiento de hierbas entre ellas. Como veis, "matamos" unos cuantos pájaros de un tiro.

Empezamos el proceso en un lugar del huerto o la cajonera cavado previamente:

1. Alisamos la tierra con el rastrillo dejando una superficie uniforme. Así, al quedar igual de sepultados, nacerán todos al mismo tiempo.

1. Depositamos las semillas en la tierra colocándolas como ya hemos dicho a unos 6cm de separación unas de otras.

1. Presionamos las semillas sobre la tierra para que no queden bolsas de aire. Yo utilizo esa tablita tan mona que me preparó Manolo pero puede hacerse con la parte posterior de una pala o con cualquier objeto plano.

1. Las cubrimos con una capa de tierra de unos 6cm de altura.

1. Marcamos el lugar con unas cañas y presionamos de nuevo.

Hasta aquí, la siembra. Ahora nos toca esperar a que aparezcan las plantitas. Procuraremos mientras tanto que el terreno se mantenga con humedad. 

Más adelante, iremos contando el resto de esta bonita historia.

Ya tengo publicada una entrada bastante completa sobre la siembra y el cultivo de guisantes pero a riesgo de repetirme, me ha hecho ilusión mostraros mi trabajo de hoy que como bien sabemos los que nos dedicamos a esto, se repite con pocas variaciones temporada tras temporada.

* Después de  transcurridos 13 días, actualizo la pagina para mostraros como han aparecido hoy las primeras plantitas.