EL LAUREL (Laurus nobilis)
Pasé mi niñez en León, tierra de clima continental, con inviernos fríos poco aptos para el cultivo de un laurel pero mi abuela, que disponía de un huerto tapiado, plantó uno en el rincón más abrigado y consiguió que viviera durante muchos años.
Como el pobrecillo no se encontraba en su mejor habitat, se conformó con desarrollarse como arbusto de discreto tamaño.
Cuando vine a vivir a Cantabria y vi laureles que eran auténticos árboles, no daba crédito a mis ojos.
En estas tierras, nacen espontáneamente. Forman parte de la vegetación natural de los bosques que surgen sobre afloramientos de rocas calizas, junto con encinas, madroños, aladiernos, acebos, avellanos y espinos albares y que recibe el nombre de "encinar cantábrico"
El laurel (Laurus nobilis) es de hoja perenne y desarrolla una copa frondosa, ramificada a veces desde la
base por lo que puede desarrollarse como arbusto o como árbol.
En su hábitat natural puede alcanzar los 6 metros de altura
aunque en los jardines suele mantenerse más bajo.
El tronco tiene la corteza lisa, de color gris y las ramas, cuando son jóvenes, de color verde o rojizo. Se van agrisando a medida que maduran.
El tronco tiene la corteza lisa, de color gris y las ramas, cuando son jóvenes, de color verde o rojizo. Se van agrisando a medida que maduran.
Sus hojas son muy aromáticas por lo que se usan mucho en la cocina; tienen forma lanceolada y borde
liso que a veces se ondula.
Las nuevas son más grandes (de hasta 10cm), de un verde más claro y menos aromáticas.
Las maduras o más viejas, son más pequeñas, coriáceas, de un verde más oscuro por el haz, más claro por el envés y menos onduladas.
Los laureles son dioicos. Esto quiere decir que unos ejemplares son masculinos y otros femeninos.
Los masculinos desarrollan las flores en ramilletes que surgen de las axilas de las hojas. Son de color amarillento y tienen 4 pétalos y entre 8 y 12 estambres.
Las nuevas son más grandes (de hasta 10cm), de un verde más claro y menos aromáticas.
Las maduras o más viejas, son más pequeñas, coriáceas, de un verde más oscuro por el haz, más claro por el envés y menos onduladas.
A la izda, hoja nueva, en el centro, vieja por el haz y a la dcha, vieja por el envés.
Los masculinos desarrollan las flores en ramilletes que surgen de las axilas de las hojas. Son de color amarillento y tienen 4 pétalos y entre 8 y 12 estambres.
Las flores de los femeninos tienen un pistilo verdoso en el centro.
Los frutos son drupas negras ovaladas parecidas a las
aceitunas que contienen un aceite medicinal pero no son comestibles.
Si se desea tener laureles que lleguen a dar fruto,
necesitamos plantar pies femeninos y masculinos.
CÓMO CUIDAR UN LAUREL
Si el clima lo permite, merece la pena tener un laurel. Son propios de climas cálidos y benignos pero también
soportan bastante bien el frío si se les
ubica en un lugar protegido.
- Le gusta el pleno sol y el riego veraniego.
- Un lugar resguardado del viento aunque lo soporta bastante bien.
- Si el frío invernal es muy intenso, hay que protegerlo cubriendo el suelo a su alrededor.
- Se adapta a casi cualquier tipo de suelo pero prefiere los de tipo calizo y más bien secos.
- Puede cultivarse en maceta. En climas fríos es lo mas indicado ya que así puede protegerse en invierno.
- Se reproducen por medio de semillas o de esquejes, mejor semileñosos. También por acodo o por retoños basales. Las semillas han de estratificarse, es decir, tienen que pasar un invierno enterradas en el suelo.
El laurel es un árbol o arbusto que resulta más interesante
por su follaje que por sus flores o frutos aunque también estos son decorativos
y aromáticos.
Como seto es muy adecuado ya que soporta muy bien la poda y
forma una masa densa y perenne que aísla muy bien.
Puede usarse como cortavientos para proteger zonas más
delicadas del jardín ya que sus hojas coriáceas resisten bien el viento y
sus ramas flexibles también. Aquí en Cantabria es muy frecuente rodear las
plantaciones de naranjos y limoneros con laureles para protegerlos del terrible
viento sur y del frío.
Tolera la sal por lo que es muy adecuado para zonas
costeras.
Como planta aromática, sus hojas son y han sido muy
apreciadas en la cocina tradicional española. Es muy típico en Cantabria, hacer
el arroz con leche cociendo este con una hoja de laurel. También resulta
imprescindible en un ramillete de hierbas o en un bouquet garni.
PODA
Si nuestro laurel es un arbusto más de los que hay en el
jardín, apenas necesitará poda. Solo si adquiere un tamaño excesivo o crece de
forma irregular, lo podaremos en primavera.
Si de lo que se trata es de una poda de rejuvenecimiento, la
haremos también a principios de primavera, de forma intensa, casi a ras de suelo, cortando por encima de un brote nuevo.
Si lo que queremos es ir dándole una forma determinada, recortamos las ramas de noviembre a marzo y en junio las recortamos de nuevo. Luego, cada mes, recortaremos las puntas que sobresalgan de la forma elegida.
CURIOSIDADES
En la antigüedad era considerado un árbol sagrado. Según la leyenda, la ninfa Daphne fue convertida en laurel para esquivar a Apolo.
Los romanos tejían con sus ramillas coronas con las que honraban a sus personajes ilustres.
Los romanos tejían con sus ramillas coronas con las que honraban a sus personajes ilustres.
Era y sigue siendo el símbolo de la sabiduría . Aún hoy día utilizamos la expresión “poeta laureado”
No hay que confundirlo con el laurel cerezo (Prunus laurocerasus) o con el laurel de Portugal (P. lusitanica) que no son comestibles.
Comentarios
"Y los libres del mundo responden:
"Al gran pueblo argentino, ¡salud!"
Sean eternos los laureles
que supimos conseguir.
Coronados de gloria vivamos...
¡o juremos con gloria morir!,
Besos Ruqui, hoy desde
http://norma2-siempreesprimavera-norma2.blogspot.com.ar/2014/10/purpurina-brillantina-diamantina.html