JUDÍAS VERDES CONGELADAS
Como nos da tantísimas, guardo para todo el año.
Como más me gusta conservarlas es congeladas. Os cuento mis pequeños trucos:
- Las recojo por la mañana, antes de que les de el sol.
- Las lavo con agua fresca para quitarles el polvo que pudieran tener.
- Les quito el peciolo o rabillo y el resto se queda entero. Nada de cortarle los bordes ni los hilos porque utilizo una variedad que no forma hilos y además, las recojo jóvenes y tiernas (como todas las hortalizas) que es como más ricas están.
- Las escaldo en agua hirviendo: pongo una cacerola grande con abundante agua al fuego. Cuando el agua hierve, introduzco las judías y cuento dos minutos a partir del momento en que empieza a hervir de nuevo.
- Las saco inmediatamente para otro recipiente con agua fría y las refresco bajo el grifo hasta que se enfrían,
- Una vez frías, las escurro muy bien colocándolas sobre papel de cocina o sobre un paño limpio y las empaqueto.
Lo siento pero no me gustan las bolsas que venden para congelados así que hago unos paquetitos con ración para dos o tres personas de la siguiente manera:
- Una vez cerrado, lo envuelvo de nuevo con otro film, lo etiqueto y al frigorífico durante unas horas y luego al congelador.
De esta manera quedan estupendas. Lo que no se puede hacer es congelarlas en crudo ya que adquieren mal sabor y consistencia correosa.
Cuando se sacan, necesitan muy poca cocción; en 6 u 8 minutos estarán listas.
Para recolectarlas también tengo "mi truquillo". Como siembro una variedad enana que apenas alcanza los 30cm de altura y no necesita tutores, planto en medio del bancal mi taburete de madera, me siento relajadamente con el cesto al lado y las recojo a diario o cada dos días, dependiendo del tiempo, sin ningún tipo de esfuerzo.
El año pasado sembré unas pocas en la cajonera y produjeron muchísimo también, igual que las del huerto.
Cuando se sacan, necesitan muy poca cocción; en 6 u 8 minutos estarán listas.
Para recolectarlas también tengo "mi truquillo". Como siembro una variedad enana que apenas alcanza los 30cm de altura y no necesita tutores, planto en medio del bancal mi taburete de madera, me siento relajadamente con el cesto al lado y las recojo a diario o cada dos días, dependiendo del tiempo, sin ningún tipo de esfuerzo.
El año pasado sembré unas pocas en la cajonera y produjeron muchísimo también, igual que las del huerto.
Comentarios
No obstante, me ha encantado la explicación de cómo preparar las judías para congelarlas. No sabía cómo se hacía y me viene bien por si algún día tengo que hacerlo.
Un besote enorme y gracias por tus consejos!!
un beso grande!
Gracias por los consejos tan buenos que pones aquí, Ruqui.
Besos.
Un beso