PREPARANDO SEMILLEROS EN CASA
¿Estamos animados a disfrutar de la maravillosa experiencia de cultivar
desde el principio nuestras propias plantas?
Me refiero a empezar el proceso a partir de las semillas.
Bien pues, ¡manos a la obra!
Para ello
necesitamos:
- Tiestos u otros recipientes tales como bandejas (pueden servir las de porospán que nos dan en el super), cajones, etc.
- Tierra de cultivo
- Semillas
- Una tablilla o maderita o algo plano con que presionar.
- Una regadera con alcachofa
Procedimiento
Elegimos el recipiente donde queremos hacer la siembra y lo rellenamos de tierra de cultivo dejando libres unos centímetros hasta el borde.
Alisamos la tierra con una tablilla u otro utensilio que
haga la función.
Esparcimos las semillas por toda la superficie de la tierra alisada.
Si las semillas son grandes, las repartimos con la mano sin problemas. Si son diminutas podemos hacerlo con un salero o mezclarlas con arena para que queden uniformemente repartidas.
Si las semillas son grandes, las repartimos con la mano sin problemas. Si son diminutas podemos hacerlo con un salero o mezclarlas con arena para que queden uniformemente repartidas.
Cubrimos las semillas con tierra. Si son muy pequeñas,
con un par de centímetro será suficiente. Cuanto más grandes, más tierra
deberemos poner encima.
Presionamos de nuevo con la tablilla de forma que las
semillas se adhieran a la tierra y no quede aire entre ellas.
Lo colocamos en un sitio protegido y soleado.
A los pocos días (cada semilla tiene su tiempo) veremos
asomar las plantitas.
Las destaparemos durante el día y las taparemos por las
noches hasta que tengan un poquillo de consistencia.
Cuando sean grandecitas, las trasplantaremos cada una a su maceta o a su lugar en el huerto.
Comentarios
Un beso